En un maravilloso día a inicios de verano, Simón y su familia iban de vacaciones a un hotel de playa con parques acuáticos y que estaba cercano a una gran reserva forestal.
En donde Simón esperaba que fuera un lugar increíble y estuviese lleno de mucha diversión.
Cuando llegaron al hotel, desempacaron las maletas y fueron a comenzar a descubrir todo lo había en el hotel.
Primero fueron a los parques acuáticos y ahí estuvieron toda la mañana divirtiéndose todos juntos en familia.
Después de unas horas de gran diversión salieron de los parques acuáticos y se dirigían a la reserva forestal, para ver toda la hermosa naturaleza y todos los animales que había en el lugar.
Camino al lugar observaron unos hermosos pavos reales de muchos colores.
Y la mama de Simón dijo “¡Que hermosos pavos reales!, seguro todo lo que encontraremos en la reserva será maravilloso”.
Cuando llegaron vieron lo impresionante y maravilloso que era el lugar.
Estuvieron toda la tarde en la reserva forestal y cuando estaba oscureciendo decidieron regresar al hotel para descansar luego de un grandioso día.
Al día siguiente cuando iban a continuar con todas las aventuras, Simón observo que los pavos reales estaban justo en el área donde se hospedaban y parecía que lo habían seguido.
Entonces dijo “Los pavos que vimos ayer en el camino, parece que están paseando por todo el hotel, ¡Que bonitos se ven!”.
Pero después de un rato observo que no paseaban por el hotel sino que lo estaban siguiendo a todos lados.
Entonces Simón dijo “¿Que será lo que tengo, que los pavos me están siguiendo?
Y no entendía cual podía ser la razón de que siempre lo estaban siguiendo.
Así que reviso si era algo de su ropa, zapatos o si tenía algún rastro de comida, pero todo estaba igual como siempre y no detectaba nada extraño.
Así que pensó durante un rato, para ver si encontraba la razón, pero no la podía encontrar.
Por lo que siguió su paseo mientras lo descubría.
Después de un tiempo de que los pavos lo siguieran a todos lados se fue haciendo amigos de ellos y se habían convertido en parte de las aventuras que realizaba.
Aunque no entendía porque lo seguían, se estaba divirtiendo mucho.
Con ellos todo era más emocionante y divertido.
Después de algún tiempo, descubrió que en el pantalón tenia una etiqueta roja, que les llamaba la atención y por eso lo seguían a todas partes.
Entonces dijo “Ahh, siempre fue esta etiqueta de mi pantalón, que no había visto que tenia”.
Al quitar la etiqueta lo dejaron de seguir y el fue que comenzó a seguirlos, para seguir disfrutando de las grandes aventuras antes de que terminaran las vacaciones.
Todo era increíble y nunca espero divertirse tanto como lo había hecho con los pavos.
Al llegar el último día del paseo estaba un poco triste porque ya no podría seguir divirtiéndose con los pavos, pero siempre recordaría este inolvidable verano.
Por haber pasado grandes aventuras con los pavos y que habían sido las mejores vacaciones que había tenido.
Autor: Samuel Frias 
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